Para piel sensible:
El macerado de caléndula es perfecto para el cuidado de la piel: áspera, agrietada, sensible e irritada. Hidrata, suaviza y regenera eficazmente. Puede utilizarse como base para la producción de cremas y lociones corporales. Este macerado también funcionará bien en combinación con aceites, que pueden ser una fuente adicional de nutrición para la piel. El macerado de caléndula tiene una fragancia delicada que es fácil de incorporar a la fragancia.