Propiedades del aceite de perejil
El aceite de semilla de perejil contiene muchos nutrientes, entre ellos ácidos grasos monoinsaturados, sobre todo ácido oleico (45,8%) y ácido linoleico (44,6%), así como valiosos aceites esenciales como el apiol, la miristicina y el limoneno. En uso alimentario, el aceite mejora la digestión y la absorción de los alimentos. Tiene un efecto colagogo y estimula la secreción de jugos digestivos. Además, puede aliviar el reflujo, el estreñimiento y la flatulencia al favorecer el movimiento peristáltico de los intestinos. El aceite también tiene un efecto diurético, por lo que favorece la limpieza de las vías urinarias y aumenta el flujo sanguíneo a través de los riñones. Protege contra las infecciones, reduce la hinchazón y favorece los procesos de desintoxicación del organismo. El aceite de semillas de perejil no se recomienda a las mujeres embarazadas y lactantes, ya que puede estimular las contracciones uterinas. Tampoco debe utilizarse en cantidades excesivas debido a las interacciones con medicamentos. En uso cosmético, el aceite de perejil muestra propiedades antiinflamatorias y antibacterianas. Puede aplicarse tópicamente en las zonas afectadas para ayudar a curar heridas y rozaduras y reducir la inflamación. El aceite también puede usarse en cosméticos para pieles maduras, vasculares y grasas, para igualar el tono de la piel, hidratarla e iluminar el cutis. Gracias a su contenido en vitamina C, el aceite tiene un efecto despigmentante y también reduce las ojeras y la decoloración. Además, gracias a su contenido en ácido petrosélico, este aceite favorece la producción de colágeno y elastina. Cuando se utiliza en cosmética corporal, el aceite de semillas de perejil mejora la circulación y refuerza las paredes de los vasos sanguíneos, minimizando el aspecto de las «arañas vasculares». Además, este producto estimula el crecimiento del cabello, reduce su caída, fortalece sus raíces y mejora su estado.