Propiedades:
El hidrolato de aloe vera es extremadamente suave pero eficaz, por lo que es adecuado para todo tipo de pieles, especialmente las sensibles, secas e irritadas. Su principal beneficio es la hidratación profunda, que aporta a la piel ingredientes hidratantes esenciales, manteniéndola suave, flexible y radiante.
El efecto calmante del hidrolato de aloe vera es inestimable para la piel enrojecida, la piel irritada por factores externos como el viento, el sol o la contaminación, así como después de procedimientos cosméticos intensivos. Ayuda a calmar las sensaciones de quemazón y picor y reduce eficazmente el enrojecimiento, devolviendo a la piel una sensación de confort.
Las propiedades regenerativas del hidrolato de aloe vera favorecen los procesos de renovación celular, acelerando la curación de pequeñas lesiones epidérmicas, como abrasiones y microlesiones. Además, gracias a la presencia de antioxidantes, este hidrolato contribuye a proteger la piel de los daños causados por los radicales libres, favoreciendo la conservación de un aspecto joven durante más tiempo.
Aplicación:
Su textura ligera y acuosa hace que el hidrolato se absorba rápidamente sin dejar una película pegajosa en la piel, lo que lo convierte en una opción excelente como tónico facial, bruma refrescante o ingrediente de mascarillas caseras.