La eficacia del hidrolato de geranio contra el brillo excesivo de la piel se debe a su capacidad para reequilibrar los aceites naturales de la piel. El producto también es conocido por sus propiedades antibacterianas y antiinflamatorias, por lo que puede ayudar a reducir el acné y otras afecciones inflamatorias de la piel. Su suave acción antiséptica ayuda a limpiar la piel de las bacterias que pueden contribuir a la aparición de manchas.
Además de estas propiedades prácticas, el hidrolato de geranio tiene una sutil fragancia floral que produce un efecto relajante. Su versatilidad permite utilizarlo como tónico facial para refrescar, tonificar y restaurar la luminosidad natural de la piel, así como ingrediente de mascarillas y otros productos para el cuidado de la piel.
Utilizar hidrolato de geranio puede mejorar notablemente el aspecto de la piel, haciéndola más apagada, clara y sana. Puede utilizarse por la mañana y por la noche para maximizar sus efectos beneficiosos, pulverizándolo directamente sobre el rostro o aplicándolo sobre la piel con un algodón. Gracias a sus propiedades calmantes, también es ideal para utilizar después de la exposición al sol o tras una jornada intensa, cuando la piel necesita relajarse y regenerarse.