Composición de la mantequilla de jazmín:
El aceite de almendras dulces
que constituye la base de nuestra manteca, es apreciado por sus intensas propiedades hidratantes. Es rica en vitaminas A y E, magnesio y grasas saludables que ayudan a mantener la piel suave, hidratada y sana. El aceite vegetal endurecido añade una textura cremosa y fácil de untar a la manteca, que penetra rápidamente en la piel para aportar nutrientes esenciales.
Pero el mayor argumento de venta de este producto es el aceite de jazmín que contiene. Su fragancia intensa y exótica transforma el cuidado diario de la piel en una experiencia única. El jazmín también es conocido por sus propiedades antisépticas y antioxidantes, que ayudan a proteger la piel de factores externos nocivos.
¿Cómo utilizar la mantequilla de jazmín?
La manteca de jazmín es excelente para todo tipo de pieles, pero está especialmente recomendada para pieles secas, maduras y sensibles. Puede utilizarse para el cuerpo, la cara e incluso el cabello. Es ideal como ingrediente de cosméticos caseros: lociones, mascarillas o cremas.
