Propiedades saludables de la morera blanca:
La morera blanca deshidratada contiene grandes cantidades de vitamina C, que actúa como potente antioxidante, reforzando el sistema inmunitario y protegiendo al organismo de los radicales libres.
La fruta también es fuente de hierro, potasio, fósforo y magnesio, que favorecen los sistemas circulatorio y muscular.
Además, la morera blanca es rica en polifenoles, como el resveratrol, que presentan potentes efectos antioxidantes y antiinflamatorios.
La morera también es una fuente de fibra dietética, que mejora el peristaltismo intestinal, facilita la digestión y previene el estreñimiento.
Sin embargo, la morera blanca debe su mayor popularidad a una sustancia que inhibe la descomposición de los azúcares. Es gracias a ella que estas frutas dulces se utilizan en la lucha contra los kilogramos innecesarios y pueden ser un componente importante de la dieta de las personas con diabetes. La mora ayuda a reducir los niveles de azúcar y colesterol en sangre. También reduce el apetito por lo dulce.
Usos del fruto de la morera blanca:
La morera desecada puede utilizarse para preparar infusiones y decocciones.
Tiene un sabor dulce, ligeramente a nuez, que combina bien en muchas recetas, tanto dulces como saladas.
La fruta desecada también puede comerse sola y como añadido a la avena, el muesli, los batidos, los productos dulces horneados, las ensaladas o los postres.