El contenido de aceite de la pulpa del fruto es de aproximadamente 1,5-3% (peso fresco).
El aceite de espino amarillo contiene ácidos grasos monoinsaturados y carotenoides, así como enormes cantidades de tocoferoles, tocotrienoles y esteroles vegetales.
Los aceites de semillas y frutos de espino amarillo difieren en sus perfiles de ácidos grasos. El ácido linoleico y el ácido α-linolénico son los principales ácidos grasos del aceite de la semilla, mientras que el aceite del fruto del espino amarillo contiene aproximadamente un 65% de ácidos monoinsaturados combinados, ácidos oleoplámicos y el ácido graso saturado, o sea el ácido palmítico. Esto provoca una diferencia fundamental entre los dos aceites en cuanto a su aspecto y consistencia.
El aceite de espino amarillo tiene un color naranja oscuro y una consistencia espesa. Los carotenoides son los pigmentos que dan a la baya de espino amarillo su característico color rojo anaranjado; estos compuestos están presentes en cantidades significativas en el aceite prensado. Los principales carotenoides presentes en el aceite de espino amarillo son el betacaroteno, la zeaxantina y el licopeno.
Nuestro aceite de espino amarillo tiene una alta concentración de carotenoides (un mínimo de 250 mg/100 g).
El aceite de espino amarillo se extrae del fruto de la planta. Este producto está prensado y sin refinar, por lo que conserva muchas de sus propiedades naturales que favorecen la salud. El aceite de espino amarillo es rico en grasas insaturadas, como el ácido oleoesteárico, así como en vitamina C, riboflavina, vitaminas A, E y B12. Además, contiene microelementos como el selenio, el hierro, el cobre, el fósforo y el magnesio. El aceite de espino amarillo ecológico previene la inflamación del aparato digestivo, reduce los trastornos estomacales, hidrata la piel y previene su envejecimiento.